El mundo de la enología y viticultura es infinito. Con cada añada nueva, con cada mezcla y con cada estación, nacen vinos únicos. Hoy en día las mujeres lideran la industria desde distintos papeles como sommeliers, enólogas y consumidoras. Sin embargo, las mujeres han estado presentes en la producción a lo largo de la historia.
A finales del siglo XIII, en un contexto complicado en medio de guerras, Nicole Barbe Ponsardin, mejor conocida como Madame Viuda de Clicquot, edificó una de las bodegas más famosas del mundo e innovó técnicas para la vinificación.
En el caso de México cada vez vemos más la presencia de mujeres en posiciones de enología, campo, producción, sommeliers y puestos relacionados con la distribución del vino.
Las mujeres mexicanas continúan lidereando la preferencia por el vino mexicano desde hace más de diez décadas en la toma de decisión de la compra. Monte Xanic actualmente tiene el 53% de sus posiciones en manos de mujeres.
Mas allá de la historia, el mundo del vino y sus posibilidades están en las nuevas perspectivas de las mujeres, que por su trabajo aportan creatividad y nuevas formas de percibir el vino. En palabras de la enóloga Virginia Etchart, “lo interesante de los cambios es que siempre vienen bien, renuevan, refrescan, emocionan y nos ayudan a crecer.”